En 1995, Toy Story redefinió la animación digital y abrió una nueva era en la cultura pop. Treinta años después, su legado trasciende la pantalla para entrar en el terreno de la moda de la mano de Levi’s: una cápsula exclusiva que combina la estética Western con el refinamiento del denim icónico.
Denim con narrativa y carácter
La colección Levi’s x Toy Story 30 Aniversario no busca disfrazar, sino reinterpretar. Cada prenda recoge símbolos de la saga y los convierte en detalles de diseño pensados para un consumidor adulto que reconoce la película como parte de su memoria cultural.
Chaquetas Type II y Type III en índigo profundo con bordados discretos, camisas Western en ecru con estampados de inspiración vaquera, jeans carpenter y flare que dialogan con la sastrería urbana: piezas que transmiten un aire de autenticidad y carácter. En lugar de jugar a la literalidad, la propuesta se mueve en el terreno del guiño sofisticado.
Jessie, Woody y el nuevo lenguaje Western
Para mujeres, el acento está en la independencia de Jessie: siluetas poderosas en denim estructurado, detalles bordados que elevan la pieza a un nuevo nivel y cortes que equilibran feminidad y fuerza. Para hombres, Woody es reinterpretado como arquetipo del vaquero moderno: un estilo Western que dialoga con la vida urbana.
Los accesorios —cinturones con hebillas metálicas, pañuelos, sombreros o tote bags— aportan la capa final para un look que trasciende la nostalgia y se convierte en statement.
Una alianza de clásicos americanos
Toy Story fue la primera cinta animada por computadora; Levi’s es el creador del jean que se volvió sinónimo de modernidad. En esta colaboración se encuentran dos íconos de la cultura americana para hablarle a una generación adulta que creció con la película y hoy busca reinterpretar su historia a través del estilo.
La colección Levi’s x Toy Story 30 Aniversario ya está disponible en Levi.com, la app de Levi’s, tiendas seleccionadas y DisneyStore.com.
Más allá de la nostalgia
Esta cápsula no es para disfrazarse de Woody o Jessie. Es para recordar que la moda, como el cine, puede transformar nuestra memoria en identidad. Y que un buen denim, al igual que una buena historia, nunca pasa de moda.
